Carlos Fonseca
ISBN: 978-84-339-9840-8
Páginas: 432
Editorial: Anagrama
«Durante muchísimo tiempo él mismo había pensado, al igual que ella, que el arte moderno era una broma malísima, un juego para iniciados pretenciosos».
ADVERTENCIA: He leído varias descripciones de este libro y me sorprende que reiteradamente se menciona el papel del Subcomandante Marcos como si fuera algo relevante en la trama. Si usted se está animando a leer Museo Animal solo por esa referencia, ¡deténgase! El Subcomandante es mencionado muy al final del libro y a penas un par de veces siendo irrelevante su papel en esta historia.
Museo Animal es la historia de una familia (padre, madre e hija) que se alejan de la civilización en busca de un lugar prometido, de un guía. Sin encontrar lo prometido, los miembros de esta familia se separan y cada uno continúa su vida a su propia manera. El libro nos lleva a conocer qué ha sido de la vida de los tres personajes.
Para encontrarnos a nosotros mismos necesitamos contemplarnos en nuestra forma más simple, despojarnos de aquello que hace ruido a nuestra esencia. Esta búsqueda del origen, de lo natural de cada uno, de un guía, la espera por un momento, es la que lleva a muchos a vincularse a comunidades segregadas. ¿Y si el guía no se encuentra? ¿Y si la promesa no se cumple? ¿Y si ese fin del mundo no llega y el líder resulta tan humano como todos?
A mi, la reflexión de fondo tiene que ver con el arte y esto explica el nombre del libro, «Museo Animal».
Si damos por sentado que el arte genera emociones, ¿qué es y qué no es arte? En la época el «fake news», de las «seudoverdades», ¿inventar una historia y hacerla pasar por real sería arte? ¿además del deseo de engañar, qué diferencia hay entre el escritor de ficción y quien crea una noticia falsa? ¿podríamos pensar que una compilación de «fake news» escritas por un mismo autor se convertiría en el catálogo de su obra? ¿sería este un arte ilícito? ¿vale la pena incluso llegar a la cárcel o a la muerte con tal de ver la obra culminada?
La vida es un museo en el que vamos observando a los otros pero también en el que somos observados. Caminamos por la vida y en el trayecto construimos nuestra propia obra en la que somos objetos cambiantes y en movimiento.
Morning Sun y Office in Small City son dos obras de Edward Hopper en las que observamos a sujetos que acaso no se han dado cuenta de que les espiamos.


FRASES MEMORABLES:
«Hay lugares que producen la sensación de estar metidos en un error».
«…solo una frase del subcomandante, perdida entre tanta cita dolorosa, logró sacarme de mi desconcierto. Una frase que decía: «Para que nos vieran, nos tapamos el rostro; para que nos nombraran, nos negamos el nombre; apostamos el presente para tener futuro; y para vivir… morimos»».
«Siempre ignoramos que alguien puede estar mirándonos por una ventana».
«Así somos los hombres privados: amamos lo que está detrás de las ventanas. La cercanía se nos hace insoportable».
«Ser apuesto es otra forma de ser rico».
«Cambiar de vida, decía, es un derecho»
«…la literatura más innovadora, la más vanguardista, era aquella que un autor desconocido inventaba como una simple solución a la falta de alcohol».
«…todas las historias son historias de ruinas».
«…algún día habrá más chatarrra informativa que mundo, más basura que basureros».
«…todo relato era necesariamente incompleto, toda historia quedabba finalmente cubierta por un secreto».
«Ha llegado hasta el final de la selva solo para encontrar que al final del viaje el viajero encuentra un simple reflejo de su deseo».
««Así que aquí estamos, burlando la muerte en la realidad»
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